domingo, 4 de mayo de 2014

Carrera salto de Aradón

No podía faltar a la cita de Alcanadre. Os puedo asegurar, que después de correr la carrera, he terminado con un excepcional sabor de boca por la buena organización de la carrera y el gran ambiente que ha habido en la carrera.
Todo estaba perfectamente señalizado, y en cada cruce había gente. Además, al finalizar mogollón de comida y bebida que todos los runners agradecemos según llegamos a meta.
Dicho esto, ahí estaba yo dispuesto a darlo todo en la carrera.
He llegado muy tarde, con apenas 20 minutos y ya se habían entregado todos los dorsales pero menos mal que he dado rápidamente con una chica de organización que rápidamente me ha conseguido mi dorsal.
Como no tenía tiempo, he calentado 10 minutos y ya nos han llamado a línea de salida. 
Había mucha gente conocida y buena, entre otros mi amigo Enrique, Torreiro, un chico que debió hacer tercero este jueves en Arnedo,..... En definitiva, gente que iba a rodar muy rápido.
Dan la salida y dejo que sean otros los que pongan el ritmo inicial. A los 200 mtrs de salir ya veo que el ritmo es muy lento y paso a comandar la carrera.
A los 500 mtrs de salir comienza ya la subida, que según había visto en el perfil, llegaba hasta el km7.  
Comienzo a subir a marcheta rápida con un viento de cara increíble. Al mirar hacia atrás veo que el único que se ha decidido a venir conmigo a sido Enrique. Le digo que se ponga tras mi ya que hace mucho viento y así poder hacer los dos camino junto.
Voy mirando hacia alante y veo que la subida va ser muy pero que muy larga. Poco a poco mis piernas comienzan a coger ritmo del bueno y en el km2 al mirar hacia atrás veo que voy solo y que Enrique se ha quedado. 
Ahora ya me toca ir sólo e intentar que por detrás no me den caza. 
Sigo subiendo y el viento de cara sigue siendo fortísimo. Al levantar la vista en el km 3 casi no me lo puedo ni creer lo que veo, un muro casi vetical de unos 500 mtr. 
Pongo una marcheta cómoda para intentar no petar pero es tan empinada la subida que las piernas se me ponen como piedras de duras.
Al final del muro veo un montón de gente animando y esto me da ánimos. Corono el muro y al mirar atrás veo a mis perseguidores bastante lejos pero no se exactamente a que distancia. 
Comienza una pequeña bajada en la que me doy en respiro para recuperar, pero no llevo 500 mtrs cuando giramos a la derecha y vuelve a comenzar una subida interminable.
De nuevo pongo marcheta rápida pero que me sea cómoda y al kilómetro o así vuelve un giro a la derecha en la que otra vez, un muro vertical. Vuelvo a poner marcheta cómoda hasta coronar y una vez arriba, ahora si, comienza una bajada vertiginosa que me lleva hasta la orilla del Ebro.
La bajada la hago con mucha precaución ya que ahí mucha piedra suelta pero una vez abajo me quedan 5km planos en los que, además de disfrutar del maravilloso paisaje, me permite correr muy rápido.
El camino que me lleva hacia Alcanadre tiene muchas rectas en las que te permiten ver la distancia con los de atrás pero cada vez que miro no veo a nadie con lo que me da la referencia de que es suficiente para llegar cómodo a la meta.
Mi ritmo es muy bueno y mis sensaciones mejores. Ya estoy en el pueblo, veo el arco de meta y es cuando me doy cuenta de que la victoria ya no se me escapa y levanto los brazos disfrutando del momento.
Me ha salido una carrera casi perfecta y ahora toca entrenar esta semana ara la medias de Zaragoza, que seguro, otra historia bien distinta será.

Aquí os dejo unas fotitos














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