Primero en lo deportivo, el sábado a las 20 de la tarde llegaba a casa después de 6 horas de viaje que me dejaron las patas súper cansadas, y lo peor de todo, el domingo a las 5:30 me levantaba para irme a zumaia a meterme nada mas y nada menos que 42k por montaña, casi nada.
Segundo, en el trabajo. Ha tocado volver a la rutina y a por todas.
Ha sido una semana de comer mucho y mal, y sobre todo, de beber mucha cerveza. Esto ha hecho que haya vuelto a casa con 3 kg de mas y con las piernas súper cansadas pero después de la paliza de la carrera de ayer la cosa a cambiado bastante.
Mañana haré la crónica y os aseguro que no tendra desperdicio ya que ha sido una carrera totalmente distinta a las demás
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